Voto a quien defiende los servicios públicos
Esto parece que debería de ser algo normal, votar a quien defiende los servicios públicos, ya que cambian los gobiernos centrales, de las ciudades y los autonómicos, pero las políticas quedan iguales o empeoran; al menos, en cuanto a los transportes públicos se refiere.
Este desprecio total por el transporte público ya viene de lejos, sino, deberíamos de fijarnos en la alta corrupción que se está dando en Madrid respecto a la regulación de las VTC.
Hasta ahora pocos son los que han dado el paso para considerar al transporte público como lo que es, “un Derecho Social”.
La política ha consistido en gestionarlo bajo criterios empresariales estrictamente monetarios, como si de una empresa privada se tratara, sin tener en cuenta que lo que estaban gestionando es un servicio público que cubre un derecho social básico como es el transporte.
Los puestos de los políticos
Visto desde la perspectiva económica nos damos cuenta de que los partidos que siempre se han negado a una regulación justa de los servicios de transporte, como son Ciudadanos y Partido Popular tienen razones de peso para hacerlo.
El Gobierno de Mariano Rajoy, como todos los Ejecutivos anteriores, tiene su selecto club de las puertas giratorias.
A este selecto club pertenecen cargos de la administración que ocuparon puestos de responsabilidad y que han acabado en la empresa privada, tras adquirir una importante experiencia (o mejor dicho, contactos) en el sector público.
Cito algunos de los agraciados:
Iñigo de la Serna, Ildefonso Pastor, Isaac Martín-Barbero, Pablo Vázquez, José Manuel Vargas, Miguel Temboury, Iñigo Fernández de Mesa Vargas, Miguel Ferre, Diego Martin-abril y Calvo, Jaime Pérez Renovales, Leopoldo González-Echenique, Luis Valero Artola, Soraya Saez de Santamaría.
Siento vergüenza de seguir, pero adelante.
Aun así, nos quedan los figuras como, Alberto Ruiz-Gallardó, Ana Mato, José Manuel García-Margallo, su amigo Manuel Soria, Marta Fernández Curras, Miguel Ferré y Jaime Pérez Renovales, colega de Soraya. Suma y sigue.
La Ley 3/2015, de 30 de marzo, reguladora del ejercicio del alto cargo de la Administración General del Estado, es clara. Artículo 15.1:
«Los altos cargos, durante los dos años siguientes a la fecha de su cese, no podrán prestar servicios en entidades privadas que hayan resultado afectadas por decisiones en las que hayan participado».
El transporte público: Un derecho social
El transporte público no es un lujo ni un privilegio, sino un derecho social que garantiza la libre circulación de la población en el tejido urbano.
En la actualidad, estamos viendo como hay una lucha implacable por parte del sector privado, la patronal y los partidos políticos que representan o se pliegan a sus intereses para desguazar el sector público, que es el encargado de garantizar la mayoría de nuestros derechos sociales.
También estamos viendo como la lucha de clases se ha agudizado.
Así mismo, como el mantenimiento de los beneficios de las grandes empresas y de los privilegios del capital dejan cada vez a más trabajadores y trabajadoras en paro y amplían la población que vive por debajo del umbral de la pobreza.
Por este motivo, os animo a votar por el partido que consideréis que mejor va a defender los servicios públicos y sociales.
Es precisamente ahora, más que nunca, cuando los servicios públicos son más importantes para la clase trabajadora y debes de dar tu apoyo a aquellos partidos que está claro en el lugar que se han posicionado.
Por lo tanto, si las fuerzas representadas en los gobiernos, como son el de la vergüenza de Madrid, renuncian a la defensa del transporte público, tendremos que ser los trabajadores, trabajadoras y organizaciones las que demos un paso al frente y desalojemos del poder a aquellos que quieren destruir lo mas elemental.
Además, si quieres conocer el ambicioso proyecto Taxi Project 2.0 por iniciativa de la Asociación Profesional del Taxi, Elite Taxi, la presentación será el próximo día 10 de abril a las 11:00 en los Cines Gran Vía 2 de L’Hospitalet de Llobregat.
Te invito a conocer Taxi Project 2.0 con la intención de proponerte integrarte como parte activa en la movida más alucinante contra los desgarradores neoliberales de la economía.
Voto a quien defiende los servicios públicos
