Movilización del taxi día 26
Para Élite Barcelona no ha resultado fácil tomar la decisión de movilizarnos, somos muy conscientes del estado de excepcionalidad que vive España, y somos muy conscientes de que vivimos una crisis de población, donde no pretendemos ser más que nadie como sector, pero tampoco menos que nadie y nos sentimos obligados a que todos juntos defendamos la supervivencia del colectivo, porque el Taxi en este momento no está suplicando el cumplimiento de las leyes, únicamente estamos pidiendo sobrevivir.
Fuimos pacientes en julio una vez superado el estado de alarma, porque queríamos pensar, que dadas las peticiones del sector que desde Élite trasladamos al ministerio a través de UATAE, serían atendidas.
Un 25% de la facturación habitual no alcanza para asumir los costes de seguridad social (mínimo) y hacer frente a un préstamo de cuota media/baja, eso sin contar el resto de costes de explotación.
No digamos con cuotas altas de seguridad social, (y/o) préstamos de cuota alta.
Una situación que sólo conduce a más endeudamiento, o a entrar en una situación de impagos.
Como si acaso asumir la totalidad de los costes de explotación y préstamos, muy superiores al 25% de la facturación habitual, y no tener ningún margen para un sueldo con el que mantener las necesidades básicas de las familias, no fuese ya suficiente castigo, merecedor de una ayuda, ayudas que si están recibiendo otras empresas y trabajadores, algo de lo que además nos alegramos.
Pero el sector del Taxi no sólamente se quedó fuera de toda ayuda real, si no que ni siquiera se iban a prorrogar las moratorias de los préstamos.
Parecía una burla, cuando además se producía la imposibilidad de demostrar la caída de la facturación desde un sistema por módulos.
No nos podíamos creer que se estuviese invirtiendo tanto capital en ayudar a los diferentes sectores, empresariales principalmente, y que al sector del taxi y a sus familias se les estuviese dejando en la estacada.
Condenados a endeudarse más aún, a través de un sistema de ayudas falso e irreal.
Llegó octubre y no sólamente no hubo reacción por parte de las administraciones estatales, si no que se prorrogaron las ayudas dejando fuera al sector del Taxi de nuevo, como así reconocieron las asociaciones de autónomos, incluso las dos que firmaron el acuerdo ATA y UPTA, ya que UATAE no lo firmó.
La situación a partir de ese momento comenzó a ser límite para el Taxi y sus familias, y lo peor de todo es que nos habían dejado claro que realmente no le importaba nuestro futuro ni el de nuestras familias a la administración estatal.
Éramos muy conscientes en ese momento, que únicamente la presión y además de forma continuada, sobre los responsables de este abandono al sector del taxi, podía situarnos en el camino de ser atendidos y tratados con justicia.
Todas las vías ya se habían agotado
Con las movilizaciones que comienzan el día 26, el sector del taxi está quemando su último cartucho por sobrevivir.
La supervivencia del sector depende de lo que nosotros podamos hacer, presionar y exigir, porque las administraciones del estado nos han abandonado desde hace meses.
La supervivencia del sector empieza por intentar mover Barcelona, pero la responsabilidad de intentarlo corresponde a todos los taxistas de España, porque es ese taxi el que empezaremos a defender con uñas y dientes a partir del lunes 26.
Sabemos cómo empieza y no sabemos cómo acabará todo esto, pero de lo que si estamos seguros es que si no hacemos nada, el sector del Taxi como lo hemos conocido y el medio de vida de muchos miles de compañeras y compañeros y sus familias ha empezado la cuenta atrás.
Se han agotado todas la vías de diálogo existentes y es por eso que ha llegado el momento de volver a confiar en la fuerza del colectivo para salir de esta encrucijada que nos está llevando a la más absoluta de las ruinas y que difícilmente si no salimos a darlo todo ya sea tarde para miles de compañeros y compañeras que están al borde de perder todo por lo que han luchado.
La apuesta de Élite Barcelona es una movilización masiva donde sepamos hacer llegar el verdadero mensaje a los responsables de poner fin al acoso y amenazas del los bancos que ya huelen la sangre y ven en la ruina del taxista y un negocio arrebatando todo lo que tenemos y nos hemos trabajado durante años con esfuerzo y honestidad.
Compañeros y compañeras no dejemos que nos roben nuestros sueños y volvamos a demostrar que en los peores momentos es cuando LAS AVISPAS DEL AMB se transforman en una máquina imposible de parar y que nadie nos va a convencer que el gobierno no es capaz de pararle los pies a los bancos para proteger a nuestro colectivo.
En el peor momento del sector más unión, más fuerza y más determinación que nunca.
No tengáis miedo, no tengáis dudas, no miréis hacia otro lado, ahora más que nunca codo a codo y a por todas.
Movilización del taxi día 26
